El Covid-19 se ha cobrado la vida
de más de 1700 personas y la prensa no para de publicar noticias sobre la multitud
de efectos negativos que viene causando en China y en el mundo. Frente a esta
emergencia sanitaria vale la pena revisar algunos datos económicos para tener
una idea de la magnitud de este evento y las medidas que viene tomando el
gobierno chino.
Imagen: sourcetoday.com
Imagen: sourcetoday.com
A nivel mundial, preocupaba, por
un lado, la guerra comercial entre Estados Unidos y China, por otro lado, el
Brexit. Empezando el 2020 estas preocupaciones disminuyeron a niveles mínimos con
el anuncio del acuerdo comercial fase uno entre EEUU, y por el anuncio de la
salida de Reino Unido de la zona euro.
Cuando pensábamos que viviríamos un
2020 menos tensionado, el 20 de enero se activó una alerta por un nuevo virus
con epicentro en la ciudad de Wuhan, China. Desde ese momento, el mundo viene monitoreando
de cerca la evolución del virus, ahora denominado Covid-19 o también conocido como
el coronavirus chino.
El cisne negro del 2020
A la fecha, el costo humano del coronavirus
chino ya supera las 1700 vidas, más de 70 mil casos de contagio confirmados y
cerca de 11 mil casos de personas recuperadas. El pánico es inminente, pues el
gobierno chino aún no controla la crisis sanitaria.
Pánico que el mundo conoce, pues
en los últimos veinte años ocurrieron diversos episodios muy recordados como el
síndrome respiratorio agudo grave (SARS, por sus siglas en inglés) de 2003, la
gripe H1N1, el síndrome respiratorio de Oriente Medio (MERS, por sus siglas en
inglés) de 2012, el ébola 2014-2016, el zika 2015-2016, por mencionar los principales
casos. Todos estos eventos causaron pérdidas humanas e impactos económicos de
gran importancia, aunque cada uno tiene características y dimensiones distintas.
Gráfico: Monitoreo
del Covid-19
(Actualizado al 18-02-2020)
Fuente: The Center for Systems Science and
Engineering at Johns Hopkins University
El SARS, familia del Covid-19
Para establecer algún punto de
comparación, conviene enfocarnos en el SARS que ocurrió en la provincia de Cantón,
China en 2003. Vale aclarar que si bien este virus y el Covid-19 pertenecen a
la misma familia del coronavirus, la Organización Mundial de la Salud (OMS) advierte
que Covid-19 es menos mortal que el SARS, por lo que no debemos tratar los
casos como iguales.
De manera intuitiva veamos cómo
impactó el coronavirus SARS a la economía[1].
El virus generó pánico e incertidumbre a tal punto que las personas optaron por
permanecer en sus casas, que en términos económicos implicó una reducción del
consumo privado. Asimismo, las actividades económicas relacionadas a servicios
también se vieron drásticamente afectadas, tal como ocurre actualmente con el
Covid-19 que viene afectando al turismo drásticamente por los vuelos cancelados
y la situación de cuarentena de las ciudades chinas. Otro impacto se dio en las
inversiones locales y en el flujo de inversiones extranjeras por la reducción
de la demanda y la incertidumbre de los mercados.
En definitiva, los canales de
transmisión del SARS pueden comprenderse por medio de la contracción de
sectores como consumo y servicios, y el flujo de inversiones, los cuales son
componentes de la demanda agregada de una economía.
Un estudio realizado en 2004
por los investigadores Jong-Wha Lee and Warwick J. McKibbin sugiere que el SARS
llevó a una pérdida económica global equivalente a $40 mil millones en 2003. Siendo
el impacto más pronunciado en China, Hong Kong, Malasia, Filipinas, Singapur y
Taiwan; mientras que el impacto fue menor en países pertenecientes a la OCDE. En
otro estudio, realizado por el International Air Transportation
Association (IATA) en 2006, se estimó que el coronavirus SARS tuvo un impacto
de 0.1% en el PIB mundial, siendo Hong Kong y China los países más afectados
por el virus.
Gráfico: Impacto
del SARS del 2003 en el PIB, por países
Fuente:
Reuters, IATA
Ahora bien, la interrogante
principal es si el coronavirus actual será tan fuerte como el SARS del 2003 o
golpeará con mayor intensidad. La principal razón para pensar que el
coronavirus chino tendrá mayor impacto reside en el peso del gigante asiático
en la economía. En 2003, el PIB chino representaba alrededor de 4% de la
actividad económica mundial; mientras que ahora el PIB chino ronda el 16% (dato
del 2018).
Entonces, tiene mucho sentido
pensar que el impacto en variables como el consumo privado, los servicios y el
flujo de inversiones sea de mayor intensidad que el SARS. De hecho, las
noticias que salen a la luz refuerzan esta idea. Por el lado del consumo
privado, la población china viene contrayendo su nivel gasto por la restricción
al movimiento impuesta por su gobierno. La otra gran variable es servicios
dentro de los cuales el sector turístico es uno de los principales afectados
por la cancelación de vuelos. Otras actividades afectadas son restaurantes,
cines, proveedores de transportes, hoteles y tiendas. El sector automovilístico
es, también, uno de los principales afectados, pues empresas como Tesla, Nissan
y Airbus cerraron sus plantas en línea con los lineamientos del gobierno chino
frente al virus.
A nivel de países, las
estimaciones realizadas por Bloomberg Economics señalan que Hong Kong sufriría
un impacto de 1.6% en el PIB del primer trimestre del 2020. En la lista seguirían
Corea del Sur, al ser beneficiado de la actividad turística y ser parte de la
cadena de suministros. Brasil y Australia, también sería perjudicados por ser
exportadores de commodities a China. En términos generales, el impacto en
el PIB mundial en el primer trimestre del año sería de 0.4%.
Gráfico: Impacto
global del Covid-19 en el primer trimestre del 2020
Fuente: Bloomberg Economics
Dado que las estimaciones de los
efectos son aún prematuras, conviene monitorear de cerca las acciones que viene
adoptando el gobierno chino en materia económica. El gigante asiático no dudó
en poder a disposición millones de yuanes para la emergencia sanitaria y el
Banco Popular de China (BPC), la autoridad monetaria, inyectó $ 173.800
millones a su economía para estabilizar los impactos negativos del coronavirus en
los mercados. También, hace unos días el BPC recortó tipos de interés para la
banca comercial de 3.25% a 3.15%. Asimismo, se espera que en esta semana el BPC
recorte tipos de interés de referencia a un año (4.05% esperado vs 4.15%) y a
cinco años (4.75% esperado vs 4.80%).
Una medida adicional, fue el recorte
de aranceles para importaciones de Estados Unidos que se situaban entre 10% y
5%, y que desde el 14 de febrero se ubicarán entre el 5% y el 2,5%. Con esto, el
país asiático deberá comprar productos por un valor de 100 mil millones de
dólares a la potencia norteamericana este año. Si bien esta última medida estuvo
orientada a cumplir el acuerdo fase uno entre EEUU y China, el gigante asiático
está dando señales de que se está combatiendo de manera agresiva el virus.
[1] Fan (2003) Sars: Economic Impacts
and Implications. Economics and research department. Asian Development Bank.
Interesante!, Estamos viendo aún los primeros efectos, veremos como va evolucionando todo y como responde, no solo China, sino también el mundo.
ResponderBorrarAsi es! Algunas estimaciones indican que el impacto en el PIB mayor sería en el primer trimestre (2020Q1). Esta idea tiene como soporte los episodios anteriores como el SARS o el MERS, por mencionar algunos.
BorrarAdemás, con este coronavirus, la probabilidad de que algunos bancos centrales reduzcan tipos de interés para amortiguar el efecto del virus se ha incrementado.